
Brasil fue la primera fundación del Sodalicio fuera del Perú. Invitados por el entonces Arzobispo de Rio de Janeiro, el Cardenal Eugenio de Araujo Sales, se fundó el 30 de enero de 1986 la primera comunidad, bajo la advocación de Nossa Senhora da Guia. En 1990 se fundaría una comunidad en Petrópolis, y en 1992 en Sao Paulo.
Desde los inicios de su llegada al Brasil hasta el 2017 el Sodalicio asumió la parroquia Nossa Senhora da Guia, en Rio de Janeiro. Junto a este encargo pastoral se fue desarrollando el Movimiento de Vida Cristiana, que hoy, fuera de Rio, Petrópolis, São Paulo y Aparecida, está también presente en diversas ciudades como Niterói, São Gonçalo, Trajano de Morares, Paula Cândido, Areal, Meio da Serra y Guaratinguetá.
Los servicios de fe y la docencia en colegios son parte importante del apostolado juvenil de los sodálites en Brasil.
En el apostolado solidario la asociación Solidariedade em Marcha – Somar contribuye al desarrollo humano conforme a la enseñanza social de la Iglesia, creando condiciones de vida dignas para personas y familias pobres. Somar administra actualmente centros solidarios en Rio de Janeiro, Petrópolis y Sao Paulo, ofreciendo también programas de refuerzo y complementación escolar, educación ambiental, educación artística e informática, entre otros.
Los viajes de misiones a lugares de escasos recursos involucran también, año tras año, a grupos de personas, sobre todo jóvenes.
La evangelización de la cultura ha sido —desde los inicios de la presencia sodálite en Brasil— un horizonte importante de apostolado. En Petrópolis, por ejemplo, funciona el Centro de Estudios Católicos, organizando iniciativas diversas para la promoción del pensamiento y arte católico. Destaca entre estos el concurso artístico Histórias de Natal, una iniciativa que promueve el sentido auténtico de la Navidad.
São Paulo

Los dos ámbitos apostólicos principales del apostolado sodálite son el MVC y SOMAR (Solidaridad en Marcha). Los sodálites cuidan de la coordinación del MVC, dando particular énfasis a la vida sacramental/espiritual de sus miembros, a la animación de las comunidades de fe, y al acompañamiento personal de las personas.
Ofrecemos retiros y jornadas espirituales, cursos de formación en la fe, preparación para los sacramentos, y otras actividades formativas/comunitarias. SOMAR, por otro lado, es un proyecto solidario/apostólico que sirve a más de 300 niños y jóvenes y sus familias en una zona vulnerable de la ciudad de São Paulo a través de una formación integral, así como un servicio sacramental a los domingos.
La comunidad sodálite de São Paulo también cuida de SOMAR en la ciudad de Rio de Janeiro y Petrópolis, donde son atendidos más de 100 niños y sus familias. Cuenta hoy con 23 funcionarios entre las 3 ciudades.
Petrópolis

En Petrópolis el apostolado de los sodálites se desarrolla en profunda comunión con la misión local del Movimiento de Vida Cristiana (MVC). Los hermanos, además de participar de la vida y obras del MVC, ofrecen su colaboración con sus trabajos catequéticos, sacramentales, organizativos y dirigiendo grupos. Dos servicios en que participan activamente son el de la Mission MVC Brazil y el de Reconciliatio – Desenvolvimento da pessoa.
MISSION BRAZIL es un servicio del MVC que consiste en un programa de formación misionera para jóvenes, a través de viajes de corta duración dentro de Brasil. En este, personas de diversos lugares del mundo pueden experimentar una rica y organizada agenda de actividades misioneras y de servicio voluntario, mientras viven un encuentro con la cultura brasileña.
RECONCILIATIO es un proyecto coordinado por miembros del MVC que tiene como misión la Prevención en Salud y la Promoción del Desarrollo Integral de la persona. Esto, desde una perspectiva bio-psico-social-espiritual y por medio de intervenciones interdisciplinares. En la actualidad, actúa principalmente en el ámbito eclesial.
Además de estos dos servicios, los sodálites en Petrópolis han ayudado a llevar adelante la acción solidaria de SOMAR (Solidariedade em Marcha) y el impulso de evangelización de la cultura de CEC (Centro de Estudos Católicos). Estas organizaciones siguen realizando sus acciones evangelizadoras, especialmente a través de los miembros del MVC que han asumido responsabilidades mayores en estas.